Estados Unidos (EEUU) anunció la implementación de un proyecto de $8 millones para reemplazar equipos de telecomunicaciones de la empresa china Huawei, instalados en 13 puntos de Panamá, por tecnología de origen estadounidense. Esta medida forma parte de una estrategia para reforzar la seguridad regional y reducir la influencia tecnológica de China en el continente.
Con una duración estimada de dos años, la iniciativa permitirá que las instituciones panameñas istren de forma autónoma sus sistemas de telecomunicaciones, lo que representa un avance en soberanía tecnológica y en las capacidades de respuesta frente a amenazas del crimen organizado.
“Una vez completado el proyecto en aproximadamente dos años, las instituciones de seguridad de Panamá tendrán la capacidad de controlar y istrar sus propios sistemas de telecomunicaciones”, resalta el documento. Esto, según el gobierno estadounidense, fortalece la seguridad compartida y refuerza la relación bilateral entre ambos países.
La colaboración apunta además a mejorar las herramientas del país para combatir delitos transnacionales, incluyendo tráfico de drogas, armas y personas, en una región altamente vulnerable a estas amenazas.
“Estados Unidos está trabajando con socios en nuestro hemisferio para combatir el crimen, salvaguardar a nuestros ciudadanos y proteger la seguridad nacional de nuestros países de la amenaza del Partido Comunista Chino”, añade el comunicado.
La decisión también se enmarca en una creciente tensión global entre Washington y Beijing por el control tecnológico y las preocupaciones sobre el uso de infraestructura de comunicación para fines estratégicos.