El presidente de Colombia, Gustavo Petro, defendió este lunes desde China la decisión de su gobierno de otorgar asilo político al expresidente panameño Ricardo Martinelli, condenado por blanqueo de capitales en su país, argumentando que Colombia históricamente ha sido tierra de refugio sin distinciones ideológicas.
El mandatario recordó que su país ha ofrecido asilo político y hasta doble nacionalidad a diversas figuras perseguidas en otras naciones. “Le dimos asilo político, incluso doble nacionalidad, a perseguidos de Ortega en Nicaragua. ¿Qué hicieron? La revolución contra Somoza se le ha dado a la oposición venezolana que ha venido, que se ha quedado en Colombia. De derecha, de izquierda, no importa”, subrayó.
Petro también rememoró otros antecedentes históricos: “Se le dio a los chilenos en el pasado, se le dio a los paraguayos en el pasado, se le dio a mexicanos, no tanto, porque México ha sido respetuoso del derecho de asilo”.
A pesar de la polémica por la condena judicial que pesa sobre Martinelli, Petro enfatizó que su visión es que Colombia continúe siendo un espacio abierto para los perseguidos.
Confederación de naciones 1p4k3f
Ante los cuestionamientos de que el exmandatario panameño es una persona condenada, Petro contestó: "Pues en mi opinión, Colombia debe ser, como lo fue Panamá, un sitio de refugio. Un sitio de libertad, un sitio de libre expresión”.
En su intervención, el presidente colombiano también propuso fortalecer las relaciones con Panamá, planteando incluso una visión de integración regional más ambiciosa.
Las declaraciones de Petro se producen en medio de críticas desde Panamá, donde organizaciones como la Fundación Libertad Ciudadana han calificado el asilo a Martinelli como un agravio al sistema judicial panameño y una amenaza a la lucha contra la corrupción.